En la mañana de ayer los ciudadanos de la ciudad griega de Corinto (Κόρινθος ) recibieron con sorpresa una carta dirigida a ellos enviada hace casi dos mil años. Se trataba de una epístola de San Pablo que el propio apóstol les envió en el año 58 d. C. Con la aparición de esta nueva misiva ha pasado de dos a tres el numero de las famosas "Cartas del Apóstol San Pablo a los Corintios", por lo que las versiones que hasta ahora se manejaban de la Biblia han quedado incompletas. Muchas de las editoriales especializadas en las sagradas escrituras han manifestado su contrariedad con respecto a modificar un producto que lleva tanto siendo líder en ventas.
En la carta, de mas de doce páginas, el apóstol muestra a sus hermanos los corintios su disconformidad con el trato recibido en el establecimiento hotelero en el que se hospedó durante su única visita de la ciudad griega, a la que había sido invitado para realizar una lectura pública de sus otras dos cartas. "No me puedo creer que los muy paganos se negaran a darme una habitación con vistas al canal.", protesta el santo, que también tiene quejas contra el personal de cocina: "Me voy a encargar personalmente de que ese maldito cocinero no cruce las puertas del cielo, se le van a helar los huevos en el purgatorio." así como para el resto de los habitantes de Corinto. Durante toda la extensión de la epístola San Pablo enumera airadamente cada una de las deficiencias detectadas en su visita a la ciudad, e invita a todos los corintios a olvidar las palabras amables de sus dos cartas anteriores así como a "arrojarse al mar con piedras atadas a la cintura para librar a la cristiandad de lugares tan idiotas como Corinto."
Los corintios por su parte han recibido la carta con consternación, conscientes de que de haber sabido antes lo que el santo pensaba de ellos no habrían perdido el tiempo venerándole durante los últimos dos milenios, y culpan al servicio de correos italiano (Posteitaliane), heredero natural de los servicios postales del imperio romano, por la tardanza en haber entregado la carta. Por su parte la empresa italiana ha salido al paso de las acusaciones argumentando que si el remitente hubiese consignado el código postal de destinatario hubiese, sin duda, llegado bastante antes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario